Toda la razón, Enric. Eso de quejarse es para los que no quieren vivir la aventura de la vida. ☺️. Leí hace poco esta frase: “La queja trae pobreza, la gratitud abundancia”.
Para mí, de las mejores newsletters hasta ahora. Quizás es por mi momento personal pero que suerte que existan personas como Adriana, esperando ese podcast con ganas!
Deseando escuchar el Vida Contadas. Me fascinan las personas con esa actitud y fuerza. Aún así, y supongo que porque mi vida es ahora mismo un tobogán lleno de luppins sueño con una vida algo más sosegada. Porque aprendes mucho sí, pero ufff!!
Totalmente de acuerdo contigo. Llevo un par de años trabajando en un quirófano y al principio siempre al despertar deseaba que fuera un día tranquilo, que no pasara nada. Pero me he dado cuenta que cuando pasa de de todo es cuando más aprendes, así que ahora al despertar pienso: que pase lo que tenga que pasar (en realidad no está en nuestras manos), que yo estaré preparada para lo que venga y con ganas de aprender 🙂
Ostras.... estaba leyendo y pensando porque no ha hecho un Vidas Contadas con Adriana jajaja.... Pues he dado en el clavo... que ganas de escucharlo... Gracias por el mensaje tan profundo que traes en este Post... besoooo
Tu newsletter de hoy, Enric, me lleva a conversaciones con mi amiga del alma. Durante muchos años me dijo: “amiga, quiero que me pasen cosas”, y yo respondía: “pues yo quiero una vida serena”. Hace ya un tiempo ha empezado a decirme: “amiga, ya no quiero que me pasen más cosas”. Hoy, soy yo la que la anima a desear que le sigan pasando cosas, porque es señal de que está viva y con ganas. La animo a mantener las antenas en buen estado, dispuestas a no temerle a la vida, sino a aprender las herramientas necesarias para afrontar lo que se presente con ilusión. A transitar las emociones y transformar los miedos en retos, buscando siempre su mejor versión, que ya es maravillosa a mis ojos.
Es cierto, que hay momentos que pasan tal cúmulo de cosas al mismo tiempo, o tan seguidas que, más que respirar, hiperventilas. Sin embargo, estoy convencida de que es necesario, es más, es sabio y sano estar constantemente focalizando y agradeciendo lo bello de la vida. Esas pequeñas cosas que, por cotidianas, ignoramos y, sin embargo, forman parte del presente en el que hay que centrar la atención. La animo a interiorizar que cada tropezón no puede ser una piedra que nos lastre y hunda, sino la piedra en la que impulsarnos, seguros de que con cada circunstancia tenemos una experiencia más rica. Nos hace más sabios, abre ventanitas que se acumulan.
No es saludable compararse con nadie, pero sí observar nuestra trayectoria, ver cuál es la tendencia de nuestra versión; de eso que depende solo de nosotros. Estoy segura de que es positiva, porque la vida es un constante aprendizaje, y no la valoramos. Nos pasan inadvertidos los grandes ventanales abiertos por los que entra el sol y la brisa fresca, ¡la tendencia, eso, hay que mirar!
Toda la razón, Enric. Eso de quejarse es para los que no quieren vivir la aventura de la vida. ☺️. Leí hace poco esta frase: “La queja trae pobreza, la gratitud abundancia”.
Un abrazo.
Para mí, de las mejores newsletters hasta ahora. Quizás es por mi momento personal pero que suerte que existan personas como Adriana, esperando ese podcast con ganas!
"Lo importante es que te pase todo"
Gracias!!!!!!
Cuando dejen de pasar cosas estaremos muertos. Me encanta la filosofía de Adriana, deseando escuchar su vidas contadas💜🦔💜
Espero con ganas ese vidas contadas! Y desde hace un tiempo espero los cambios con los brazos abiertos, puerta a la monotonía⚡️
Me ha inspirado a tal punto que decidí compartirlo con mi hija de 18 años, que comienza a vivir esta vida con demasiados temores!
Gracias, me ha encantado!
Totalment d’acord amb l’Adriana!
La vida és que et passin coses, inesperades de vegades, enfonsar-te, rebifar, i tornar a l’estabilitat! Això és VIURE per mi!
🙃✨😌
Cuanta razón tiene Adriana hay k dejar k la vida fluya y pasen cosas
Con ganas de k sea domingo xa oir este vidas contadas, aunque últimamente te sales😃😉
Deseando escuchar el Vida Contadas. Me fascinan las personas con esa actitud y fuerza. Aún así, y supongo que porque mi vida es ahora mismo un tobogán lleno de luppins sueño con una vida algo más sosegada. Porque aprendes mucho sí, pero ufff!!
Embárrate hasta las cejas, Enric. Es mi deseo.
Totalmente de acuerdo contigo. Llevo un par de años trabajando en un quirófano y al principio siempre al despertar deseaba que fuera un día tranquilo, que no pasara nada. Pero me he dado cuenta que cuando pasa de de todo es cuando más aprendes, así que ahora al despertar pienso: que pase lo que tenga que pasar (en realidad no está en nuestras manos), que yo estaré preparada para lo que venga y con ganas de aprender 🙂
Ostras.... estaba leyendo y pensando porque no ha hecho un Vidas Contadas con Adriana jajaja.... Pues he dado en el clavo... que ganas de escucharlo... Gracias por el mensaje tan profundo que traes en este Post... besoooo
Tu newsletter de hoy, Enric, me lleva a conversaciones con mi amiga del alma. Durante muchos años me dijo: “amiga, quiero que me pasen cosas”, y yo respondía: “pues yo quiero una vida serena”. Hace ya un tiempo ha empezado a decirme: “amiga, ya no quiero que me pasen más cosas”. Hoy, soy yo la que la anima a desear que le sigan pasando cosas, porque es señal de que está viva y con ganas. La animo a mantener las antenas en buen estado, dispuestas a no temerle a la vida, sino a aprender las herramientas necesarias para afrontar lo que se presente con ilusión. A transitar las emociones y transformar los miedos en retos, buscando siempre su mejor versión, que ya es maravillosa a mis ojos.
Es cierto, que hay momentos que pasan tal cúmulo de cosas al mismo tiempo, o tan seguidas que, más que respirar, hiperventilas. Sin embargo, estoy convencida de que es necesario, es más, es sabio y sano estar constantemente focalizando y agradeciendo lo bello de la vida. Esas pequeñas cosas que, por cotidianas, ignoramos y, sin embargo, forman parte del presente en el que hay que centrar la atención. La animo a interiorizar que cada tropezón no puede ser una piedra que nos lastre y hunda, sino la piedra en la que impulsarnos, seguros de que con cada circunstancia tenemos una experiencia más rica. Nos hace más sabios, abre ventanitas que se acumulan.
No es saludable compararse con nadie, pero sí observar nuestra trayectoria, ver cuál es la tendencia de nuestra versión; de eso que depende solo de nosotros. Estoy segura de que es positiva, porque la vida es un constante aprendizaje, y no la valoramos. Nos pasan inadvertidos los grandes ventanales abiertos por los que entra el sol y la brisa fresca, ¡la tendencia, eso, hay que mirar!
100% de acuerdo ❤️ Deseando escuchar la entrevista.
me ha encantado esta publicación !!!
Ganas de domingo ♥️