—Nunca he sido un libro abierto, pero explico buenos cuentos.
Ayer fue el último Vidas Contadas de la temporada y lo hicimos en directo con público en una sala de Barcelona. El invitado fue mi amigo Fabián León: emprendedor, comunicador y creador de contenido. Tuvimos una conversación íntima que la gente que estaba allí respetó con un silencio sepulcral. Fue bonito sincerarnos con testigos.
— ¿De dónde sale esa luz? ¿O es que no ves esa luz?
Al salir de la sala cogí la moto y me fui a cenar con amigos. No hay una sensación mejor que sentirte alineado. Con lo que haces, con dónde vives, con la gente que te rodea y contigo mismo. Mientras el aire me daba en la cara, la ciudad parecía acariciarme. Y en cada semáforo veía una foto. Cada esquina me parece una postal.
— Y la luna nos dio en premio e hizo un flash para lo nuestro.
Al llegar a casa, sobre la una, salí a la terraza, me senté a mirar el cielo e intenté hacer una foto a la luna. Pero como todas las cosas que son realmente bonitas, fue imposible atrapar aquel instante en una imagen. Las fotos a la luna nunca hacen justicia a la realidad, pero como dice la canción: “hizo un flash para lo nuestro”.
Supongo que la felicidad se parece bastante a días como el de ayer. Gracias a todos los que lo hacéis posible. En septiembre volvemos con más Vidas Contadas.
*Titulos: “Nadie por las calles”, Love of Lesbian.
Es que Barcelona es mucha Barcelona... yo que no nací aqui, ni en este continente, siento esa misma alineación y tengo esa misma sensación de que cada esquina es una postal, y siento un sentido de pertenecia que no había vivido antes, llevo aquí 20 años y creo que no volveré a mi país natal, este lo siento como mi ciudad de adopción.
Cada día disfruto más leyendo tus textos. ¡Feliz verano Enric!😍