Reconozco cuando alguien está pasando por una etapa por la que yo ya he pasado. La última vez fue hace unos días mientras desayunaba en un bar. En la mesa del fondo, un chico miraba al infinito con un libro encima de la mesa y los auriculares puestos. Seguía, con el pie, el ritmo de una canción mientras su mirada perdida estaba en otro lugar, lejos de allí. A mí no engañas, amigo. Sé perfectamente en qué punto estás.
El camino de esto que llaman autoconocimiento está lleno de soledad. De mañanas largas, de búsqueda, de dudas, de gente que se va y personas que, aunque siguen ahí, ya no están. De nuevas canciones y de viejas heridas. De momentos que duelen y amigos que curan. De gurús que predican imposibles, de consejos que no sirven, de noches sin dormir, de días sin hablar con nadie. De hastío, de una pena que duele en el cuerpo y de miedos que parecen monstruos.
Tuve ganas de acercarme y decirle: Toma, estas son las canciones que a mí me ayudaron, y estos los libros. Ten paciencia, por Dios. No te desesperes, que la luz siempre vuelve. No vas a encontrar ni la mitad de las respuestas que estás buscando, pero cuánto bien te va a hacer plantearte las preguntas. Cómprate una cámara de fotos que, aunque ahora no te lo parezca, la mirada que tienes hoy también es bonita. Viaja, toma distancia, cambia de perspectiva. Aprende cosas nuevas, equivócate, escribe, queda solo con quien te haga bien. Vive lento y quiere mal, no pasa nada. Llegará alguien a quien querer bien. Y sonreiréis leyendo juntos los capítulos anteriores del libro. Ya lo sé, a veces cuesta. Pero estás en el buen camino. Y vale la pena, te lo prometo.
Nuestras miradas se cruzaron y, en lugar de todo eso, simplemente le sonreí. A veces es suficiente. Y le di las gracias en silencio por haberme ayudado a entender que, gracias a haber pasado por la mesa del fondo, ahora, a solo tres metros de distancia, nos separaba un mundo.
Jo. Que bonito, que real y que gran reflexión. Todo pasa, pero antes te atropella. Gracias Enric. 🥰
¡Qué gran verdad! Que mágico es ese momento donde observas a tu alrededor y además de mirar, ves. Entonces encuentras personas pasando por donde hemos pasado y quizás otras sentadas en lugares donde nos veremos en un futuro. Gracias por explicar la vida de forma tan sencilla a pesar de mostrar momentos no tan fáciles. Qué bonito ver que hay lugares por los que todos transitamos. ¡Feliz sábado!